¿Qué es un exorcismo o posesión?
El exorcismo es un comando dado en el nombre de Dios a un demonio para que él salga de una persona, un animal, un lugar o una cosa. Es una forma especial de la bendición (sacramentalio) que el sacerdote otorga a un hombre en las situaciones y necesidades específicas.
¿Por qué una persona es poseída?
Desde las almas desorientadas que, al no tener conciencia exacta de que sus cuerpos perecederos han vuelto a la tierra de donde surgieron, vagan errantes por un espacio carente de luz buscando refugio en una nueva envoltura humana dentro de la cual, aunque no les pertenezca, se sienten protegidas, hasta los entes malévolos y perniciosos que, negándose a aceptar el perdón y la clemencia de Dios, prefieren posesionarse de un cuerpo y una mente a los cuales causan innumerables trastornos que pueden llegar hasta lo irreparable.
Estas almas llenas de malicia y perversión, de crueldad aberrante, de oscuros instintos y demoníacas intenciones, poseen el cuerpo de otra persona para sentirse vivos.
¿Cómo saber si una persona esta poseída?
1.-Es posible que necesites de la ayuda de un amigo imparcial o una cámara de video, ya que muchas presuntas víctimas afirman no recordar lo que sucede cuando están bajo el poder de un espíritu malévolo. De acuerdo con la Diócesis de San José, algunos de los síntomas comunes incluyen hablar un idioma que no conoces, mutilación de tu propia piel, fuerza sobrehumana, fatiga, falta de apetito, la aversión a la religión y emblemas sagrados. Hay otros síntomas sobrenaturales, tales como ser capaz de mover objetos con la mente, mostrar conocimiento de detalles de otras personas que no conocen, hacer que los animales gruñan, y la levitación.
2.-Busca la ayuda de un profesional de la salud mental. Han sido reportados como síntomas de la posesión de los espíritus: el balbuceo, oír voces, personalidades múltiples y catatónicas, y estados de trance. Pero también éstos son síntomas de trastornos de salud mental y neurológicos —mucho más comunes por cierto. De acuerdo a los exorcistas católicos, muchos de aquellos que buscan un exorcismo están en necesidad de remedios médicos, y no espirituales.
3.-Si un profesional de la salud no puede encontrar explicación médica para tus síntomas, entonces es posible que necesites buscar un exorcista. A los sacerdotes católicos se les da una formación especial en el seminario para ayudar en estos casos. Los exorcistas también están capacitados para identificar a aquellos con problemas de salud mental y poseídos por espíritus.
Para la práctica del exorcismo es necesaria
-Primero ser sacerdote oficial de la Iglesia Católica Romana
-Segundo haber cursado y obtenido el título oficial de exorcismo (el único título oficial se imparte en Roma-Vaticano).
-La autorización del obispo de la diócesis que puede ser concedida vez por vez para cada caso específico o de manera general por un periodo determinado
-el uso de objetos que pueden repeler al ente como crucifijos, agua bendita, reliquias, entre otros
¿Como se hace un exorcismo?
1.-El exorcismo debe ser discreto, en la casa del poseído o en un oratorio con la presencia de los familiares. Si la víctima presenta fuerza anormal, se la puede atar a una cama o una silla. El lugar debe tener un crucifijo y una imagen de la Virgen María
2.-El rito empieza con la dispersión de agua bendita, a la que se pude añadir sal. El agua, arrojada sobre el poseído y también sobre los presentes, rememora la purificación del bautismo. Luego, el sacerdote empieza a rezar.
3.-Tras las oraciones tradicionales, como el Padre Nuestro y el Ave María, el sacerdote declama algunos salmos que exaltan la victoria de Cristo sobre el Diablo y lee fragmentos del Evangelio. Luego, coloca sus manos sobre el fiel atormentado y vuelve a orar el Padre Nuestro.
4.-A continuación, hace la señal de la cruz sobre el poseído y le sopla la cara, diciendo otras palabras sagradas contra el demonio.
5.-La fórmula del exorcismo son sus oraciones finales. Existen dos tipos: la deprecativa, que es más sencilla, o la imperativa, que se utiliza solamente en casos extremos. El rito termina con una canción de acción de gracias, una oración y una bendición sobre el que estaba poseído.
Después de todo esto, el cura verifica si el Diablo abandonó el cuerpo de la persona observando su semblante: si sus ojos están calmos y en paz, su espíritu también lo está, de lo contrario, el cura vuelve una y otra vez y hace tantas secciones sean necesarias para expulsar al demonio del cuerpo.