Agentes de cambio llamados

Lección # 13
Contempladores o Transformadores
DTG 86, 87
Conexiones con la Piedra Fundamental
Lección de Jóvenes de la Escuela Sabática
4T 2021
El Poder Supremo

Introducción
¡Que Dios nos Ayude!
• Era la primavera del año 31.
• Ahora Jesús se reunió con más de 500 discípulos en su acostumbrado
Monte de Galilea. Y allí nos les la Gran Comisión.
• Después, se fue con los 11 a Jerusalén, donde les recordó que antes de ir a
cumplir con la Gran Comisión, ellos recibirían las “promesa de su Padre.”
De allí partieron al Monte de los Olivos, y cerca de Betania ascendió al
cielo, prometiéndoles que estaría con ellos hasta el fin del mundo.
• Esta promesa se cumplió 10 días después con el derramamiento del
Espíritu Santo que los capacitaría para cumplir con esa Gran Comisión.
• La promesa y la comisión es para nosotros y para nuestros hijos.
• ¿La aceptaremos?

Títulos
• Lección en español. “¿Contempladores o transformadores?”
• Lección en ingles. “Calling Change Agents” (“Llamados a Ser Agentes de
Cambio”)
• DTG 86. “Id, Doctrinad a Todas las Naciones” (Mateo 28:16-20)
• DTG 87. “A mi Padre y a Vuestro Padre” (Lucas 24:50-53), (Hechos 1:9-12)
• CBA 177. “Aparición en la Montaña de Galilea” (Mateo 28:16-29), (Marcos
16:15-18)
• CBA 178. “La Ascensión” (Marcos 16:19-20), (Lucas 24:50-53)
• 9 BHB 182. “Cuarenta Días Maravillosos”
• 9 BHB 187. “Ángeles con una promesa”

Texto Clave
• (Hechos 1:9-11)
• “Habiendo dicho esto, mientras ellos los miraban, fue llevado a las
alturas hasta que una nube lo ocultó de su vista. Ellos se quedaron
mirando fijamente al cielo mientras Él se alejaba. De repente, se les
acercaron dos hombres vestidos de blanco, que les dijeron:
• ‘Galileos, ¿qué hacen aquí mirando al cielo? Ese mismo Jesús, que ha
sido llevado de entre ustedes al cielo, vendrá otra vez de la misma
manera que lo han visto irse.’”

Un Rayo de Luz
• (DTG 770.2)
• “Cristo había estado en el mundo durante treinta y tres años; había
soportado sus escarnios, insultos y burlas; había sido rechazado y
crucificado. Ahora, cuando estaba por ascender al trono de su gloria –
mientras pasaba revista a la ingratitud del pueblo que había venido a
salvar- ¿no les retirará su aprecio y amor? ¿No se concentrarán sus
afectos en aquel reino donde se le aprecia y donde los ángeles sin
pecado esperan para cumplir sus órdenes? No; su promesa a los
amados a quienes deja en la tierra es: ‘Yo estoy con vosotros todos
los días, hasta el fin del mundo’ (Mateo 28:20)”

Una Vislumbre Adicional
• (DTG 762.2)
• “Nos enseña a mirar a toda alma menesterosa como a nuestro
hermano, y al mundo como nuestro campo.”

Cronología
• (1 Cor. 15:3-8)
• Cristo murió por nuestros pecados según las Escrituras (En la primavera del año 31)
• Fue sepultado, resucitó al tercer día según las Escrituras.
• Día 1. Resurrección. Aparición a María, a las mujeres, a Pedro y a los caminantes de
Emaús. Primera aparición en el Aposento Alto.
• Día 8. Segunda aparición en el aposento alto
• Se apareció a Cefas, y luego a los doce.
• Luego se encontró con 7 discípulos en el lago de Galilea
• Después se apareció a más de 500 hermanos a la vez, (en la montaña de Galilea).
• Luego se apareció a Jacobo (hermano del Señor), más tarde a todos los apóstoles.
• Después fueron al Monte de los Olivos para la ascensión. (Betania <a 2.5 kms de
Jerusalén> es parte de la cordillera del Monte de los Olivos)

Identifícate con la Historia
• (Mateo 28:16-20)
• “Los once discípulos fueron a Galilea, a la montaña que Jesús les había
indicado. Cuando lo vieron, lo adoraron; pero algunos dudaban. Jesús se
acercó entonces a ellos y les dijo: ‘Se me ha dado toda autoridad en el cielo
y en la tierra. Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones,
bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo,
enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les
aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo’”
• (Lucas 24:50-53)
• “Después los llevó Jesús hasta Betania; allí alzó las manos y los bendijo.
Sucedió que, mientras los bendecía, se alejó de ellos y fue llevado al cielo.
Ellos, entonces, lo adoraron y luego regresaron a Jerusalén con gran
alegría. Y estaban continuamente en el templo, alabando a Dios.”

• (Hechos 1:9-12)
• “Habiendo dicho esto, mientras ellos miraban, fue llevado a las
alturas hasta que una nube lo ocultó de su vista. Ellos se quedaron
mirando fijamente al cielo mientras Él se alejaba. De repente, se les
acercaron dos hombres vestidos de blanco, que les dijeron: ‘Galileos,
¿Qué hacen aquí mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido
llevado de entre ustedes al cielo, vendrá otra vez de la misma manera
que lo han visto irse’”
• “Entonces regresaron a Jerusalén desde el monte llamado de los
Olivos, situado aproximadamente a un kilómetro de la ciudad.”

9 BHB 182
Cuarenta Días Maravillosos
• Antes de que hubieran pasado muchos días, toda Galilea sabía que Jesús había
aparecido a 7 de sus discípulos en el lago.
• Las nuevas se esparcieron como fuego de villa en villa. Sus muchos amigos en
Caná, Capernaún, Tiberias, Nazaret, y otros pueblos, se habían sumido en un
profundo dolor por su crucifixión, y ustedes pueden imaginar cuan sorprendidos
estaban al saber que Él no estaba muerto después de todo. ¡Aunque fue sellado
en una tumba, Él ahora había caminado de regreso a Galilea!
• Era demasiado maravilloso creerlo, pero era verdad. Siete personas no podían
equivocarse. ¿No habían desayunado con Él? ¿No había Pedro, en quien todos
confiaban, platicado con Él acerca de su obra futura?
• ¿Pueden ustedes oír a los niños y a las niñas hablando acerca de todo esto?
• “Tiene que haber sido Jesús,” dijo uno. “Él estaba parado allí en la playa, tal como
acostumbraba.” Y Él les dijo que tiraran la red y ¡atraparon más de 150 peces
grandes!”

• “Si,” dijo otro. “Y aun encendió una fogata y les preparó el desayuno antes de que
ellos llegaran a la orilla. Y Él les habló y les sonrió así como siempre lo hacía antes
de morir. Me gustaría poder verlo también.”
• Más y más el rumor se esparció de que Jesús se encontraría con sus discípulos de
nuevo en la montaña donde Él había hablado con ellos tantas veces antes.
Pronto, montones de hombres y mujeres, niños y niñas, se dirigieron para allá,
todos con la esperanza de que lo verían y que escucharían su voz una vez más.
• Más de 500 personas llegaron a ese lugar tan familiar. Todos hablaban
emocionados acerca de los eventos de las últimas semanas y se preguntaban
cuando y de donde vendría Jesús entre ellos.
• Algunos estaban seguros de que este era el momento que habían esperado por
tanto tiempo cuando su amado Maestro se declararía a si mismo el rey de Israel.
Si Él pudo levantarse de los muertos, seguramente Él podría expulsar a los
romanos de su tierra, limpiar a Jerusalén de su maldad, y hacer realidad la era
dorada de la que todos los profetas habían hablado. Quizás Él aparecería como
un rey, vestido con vestiduras reales y con una magnífica corona en su cabeza.

• Pero ellos estaban equivocados. De repente alguien vio una figura familiar
caminando hacia la muchedumbre por un sendero de la montaña. Él no usaba
una corona, ni ropas reales. En vez de eso, Él se veía igual que cuando venía a
hablarles en aquellos días que ellos bien recordaban.
• “¡Es Jesús!” todos gritaron. “¡Es el señor mismo!” Y el gozo en sus voces le dijeron
a Él cuan bienvenido era.
• Todos los 500 lo vieron al mismo tiempo. La Biblia lo dice en 1 Cor. 15:6. ¿Cómo
podría alguien dudar ahora que Él había resucitado de los muertos? 500 personas
no pueden estar equivocadas.
• Entonces Jesús habló con ellos. Pero pobres de nosotros, pues sabemos muy
poco de lo que dijo. ¡Que lástima que nadie lo hubiera escrito!
• Solo algunas pocas palabras magníficas permanecen de ese último gran sermón
de la montaña:
• “Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. Por tanto, vayan y hagan
discípulos de todas las naciones, bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo
y de Espíritu Santo, enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a
ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.

• Había mucho que hacer antes de que Su reino pudiera establecerse en la tierra. Cierto, Él era su Rey; Él tenía
todo el poder en el cielo y en la tierra; pero su Reino vendría a través de la enseñanza y no a través de la
guerra.
• Y ellos podían ayudar a que esos planes funcionaran. Ellos debían ir a todas las naciones, en todo el amplio
mundo, contando la historia del amor de Dios, persuadiendo a la gente a amarse los unos a los otros, y
preparándolos para vivir felizmente en un reino de amor por siempre jamás.
• Ellos pasarían por pruebas, sufrimientos y chascos, pero no tenían que preocuparse. Él estaría con ellos
siempre, “hasta el fin del mundo.”
• Él nunca los olvidaría. Nunca. Aunque pasaran mil años. Siempre y siempre ellos serían muy preciosos para
Él. No habría ni un día, ni una hora, ni un solo instante, cuando Él no pensara en ellos con amor.
• Y Jesús dijo: “Por tanto, vayan,” cada hombre y mujer, niño y niña presentes pensaron que Él les estaba
hablando personalmente.
• Cada uno dijo después: “Él me estaba hablando a mi diciéndome que vaya. Y lo sé porque me estaba viendo
a mi.” Y claro que así fue. Él quería que todos los que creen en Él que “vayan y prediquen el evangelio a toda
creatura.”
• Nosotros no sabemos cuanto tiempo se quedó con sus discípulos en la montaña. La Biblia no lo dice, pero
sabemos que Él estuvo 40 días con ellos después de su resurrección, mostrándoles que estaba vivo con
muchas “prueban infalibles” y “hablando las cosas que pertenecen al reino de Dios.”
• ¡Fueron días preciosos! ¡Días maravillosos! ¡Cuan cortos les habrán parecido! ¡Cuan pronto se terminaron!

9 BHB 187
Ángeles con una Promesa
• Mientras Jesús estaba en Galilea, Él le debió haber dicho a sus once amigos
especiales, que fueran a Jerusalén y que lo esperaran allí. Porque la
próxima vez que sabemos de ellos, ellos están en un lugar en la ciudad –
probablemente el mismo aposento alto donde ellos se reunieron para la
Última Cena- y Jesús está “comiendo con ellos” de nuevo.
• Las cosas ahora son muy diferentes. La cruz ha pasado. Y también la
resurrección. Jesús ha muerto y resucitado. Él vive para siempre. Todo el
poder del cielo y de la tierra es suyo, y nadie puede quitarlo de su mano.
• Pero, mientras Jesús es fuerte, sus discípulos son débiles –demasiado
débiles para las grandes tareas que tienen por delante, cuando Él haya
regresado al Cielo. Así que Él les instó a esperar en Jerusalén hasta que
recibieran “la promesa del Padre”

• ¿Cuál es la “promesa del Padre”? (Lucas 24:49)
• Es algo que el Padre desea darles porque ellos han seguido fielmente a Su Hijo. Es
algo que los cambiará repentinamente de hombres ordinarios –pescadores,
recolectores de impuestos, etc.- en hombres poderosos de Dios, valientes,
incansables, predicadores poderosos del evangelio.
• “Juan bautizó con agua,” Jesús les dijo, “pero antes de muchos días, ustedes serán
bautizados con el Espíritu Santo.”
• Aún pensando en el reino, ellos preguntaron, “Señor, ¿es ahora cuando vas a
reestablecer el reino de Israel?
• -No les toca a ustedes conocer la hora ni el momento determinados por la
autoridad misma del Padre.”
• “Pero cuando venga el Espíritu santo sobre ustedes, recibirán poder.
• ¿Significa eso que cuando venga el Espíritu Santo se establecerá el reino que ellos
han esperado por tanto tiempo?
• No, el Espíritu Santo traerá el poder, la sabiduría y el valor para predicar el
evangelio del reino a la gente que nunca ha escuchado de él. “Ustedes serán mis
testigos tanto en Jerusalén como en toda Judea y Samaria, y hasta lo último de la
tierra.”

• De hecho aquí hay una nueva idea. ¿Cómo podía este pequeño grupo de
pescadores pobres, humildes, sin educación, testificar en cada ciudad
donde los sacerdotes y gobernantes habían matado a Jesús?
• ¿Y como podían ellos, sin dinero ni posesiones de ninguna clase, llevar el
Evangelio hasta lo último de la tierra? ¿Cómo podría el Espíritu Santo, “la
promesa del Padre”, hacer posibles tales cosas?
• Preguntándose aun que querría decir Jesús con estas extrañas palabras,
ellos caminaron con Él una vez más hacia el Monte de los Olivos. Esta vez,
ellos no se detuvieron en el Jardín del Getsemaní, sino que ascendieron
hasta la cumbre. El paso era lento, porque algo les decía que Él los iba a
dejar pronto y ellos querían retenerlo tanto como pudieran.
• Ahora Jesús los mira con una especial ternura en sus ojos. La hora de partir
está cerca. Él ama a estos queridos hombres. A cada uno de ellos. Él ha
vivido con ellos por más de tres años. Él sabe cuanto han abandonado por
seguirle y cuanto habrán de sufrir mientras testifiquen en su Nombre.
• ¡Querido Pedro! ¡Querido Santiago! ¡Querido, muy querido Juan! Y Tomás
también, bendito a pesar de sus dudas. Y Mateo, Felipe y todo el resto de
ellos. ¡Tan buenos hombres, con todas sus fallas!

• Puedo escucharlo a Él diciéndoles con llanto en su voz:
• ¡Benditos, benditos todos!
• De repente, ellos notaron que Él se elevaba en el aire. ¡Se está yendo!
• ¡Si! ¡Hacia arriba, más alto y más alto! Se va cada vez más lejos, hasta que la
última nube lo recibe más allá de su vista.
• “¡Adiós!” gritaron. “¡Adiós, querido Maestro!”
• Ellos lo despedían con sus manos con lágrimas en sus ojos.
• Él había desaparecido; pero ellos seguían mirando, buscando en las
profundidades del espacio, esperando contra toda esperanza que pudieran ver
aunque sea una vislumbre de Él. ¡Pero Él se había ido! ¡Se había ido!
• Ahora les vino el pensamiento espantoso de que tal vez se haya ido para siempre.
Una tristeza desesperada llenó sus corazones.
• Entonces, de repente se dan cuenta de que dos extraños están junto a ellos,
ambos vestidos de blanco. ¿Quiénes podrían ser?
• “Varones galileos,” dijeron los extraños, ¿Por qué están ustedes mirando al cielo?
Este mismo Jesús, que ha sido llevado entre ustedes al cielo, vendrá otra vez de la
misma manera que lo han visto irse.

• ¡Ahora ellos lo saben! Estos dos hombres deben ser ángeles, enviados por su
amado Maestro para consolar sus corazones con la promesa de que algún día Él
vendría de nuevo.
• ¡Cuan amable, cuan considerado era Él! ¡En su camino hacia la gloria, con todo el
deslumbrante ejército rodeándolo, Él ha recordado a sus amigos que se quedaron
en la tierra!
• Ellos regresaron a Jerusalén “con gran gozo.”
• Toda la tristeza se había ido, y ahora ellos estuvieron “continuamente en el
templo, alabando y bendiciendo a Dios,” tan contentos de que “este mismo
Jesús,” su querido Jesús, regresaría. ¡Cuan consoladora es esta “bienaventurada
esperanza”!
• ¡Y cuan hermosa esperanza es todavía hoy! “Este mismo Jesús” está de hecho
viniendo otra vez. El mismo Jesús que sanó a los enfermos, que levantó a los
muertos, que amó a los niños, que relató tan maravillosas historias, viene otra
vez! El mismo querido Jesús de Nazaret, Capernaún, Caná, quien hizo tantas
cosas amables por los pobres y por los necesitados, quien siempre fue amable y
lleno de gracia y bueno, ¡está regresando!
• No será otro Jesús, un Jesús diferente, sino “este mismo Jesús.” El tiempo no lo ha
envejecido ni alterado, por que “Él es el mismo ayer, y hoy y por los siglos.”

• Cuando Él regrese por ese camino brillante a través de los cielos, será
el mismo Jesús que ascendió ese día en el Monte de los Olivos.
• Lo conoceremos por la sonrisa en su rostro, por la dulce melodía de
su voz, y por las marcas de los clavos en sus manos y en sus pies.

Preparando la Enseñanza
I. Sinopsis
• Cuando Jesús ascendió de esta tierra, Él dejó una clara misión para sus seguidores
en (Mateo 28:19, 20)
• Dos hombres vestidos de blanco señalaron esta orden de Cristo con la pregunta:
¿Por qué están mirando al cielo? (Hechos 1:11)
• Aún hoy, como seguidores de Cristo, somos confrontados con la gran Comisión de
ir y hacer discípulos, bautizándolos en el nombre de la Trinidad. Por lo tanto, el
incumplimiento de este llamado nos enfrenta con la misma pregunta: “¿Por qué
siguen mirando al cielo?
• Nosotros podríamos estar presentando una teología correcta y ofrecer servicios
inspiradores en la iglesia, pero si no estamos cumpliendo con la Gran Comisión,
entonces solo somos observadores de estrellas.
• Dios quiere AGENTES DE CAMBIO, discípulos plenamente comprometidos que
alcancen a los perdidos y que después les enseñen a obedecer todo lo que Jesús
ha mandado.

• Esta lección provee la historia ideal para desafiar a sus estudiantes a
lanzarse a una causa más grande que ellos mismos.
• Use esta oportunidad para inspirar a su clase a responder a la
invitación de Jesús a compartir el Evangelio con el mundo.

La Pregunta Clave
• ¿Cómo podemos nosotros transformarnos de contempladores de estrellas a agentes de
cambio en el mundo?
• ¿Cómo podemos nosotros cumplir con la Gran Comisión?
• Cuando se cumpla la promesa del Padre: el bautismo del Espíritu Santo.
• (1 MS 141)
• “La mayor y más urgente de todas nuestras necesidades es la de un reavivamiento de la
verdadera piedad en nuestro medio. Procurarlo debiera ser nuestra primera obra. Debe
haber esfuerzos fervientes para obtener las bendiciones del Señor, no porque Dios no
esté dispuesto a conferirnos sus bendiciones, sino porque no estamos preparados para
recibirlas. Nuestro Padre celestial está más dispuesto a dar su Santo Espíritu a los que se
lo piden que los padres terrenales a dar buenas dádivas a sus hijos. Sin embargo,
mediante la confesión, la humillación, el arrepentimiento y la oración ferviente, nos
corresponde cumplir con las condiciones en virtud de las cuales ha prometido Dios
concedernos su bendición. Sólo en respuesta a la oración, debe esperarse un
reavivamiento.”

Tesis de la Lección
• La Gran Comisión fue dada para todos los discípulos en todas las
épocas, incluyéndonos a nosotros.
• Para cumplirla, necesitamos ser bautizados con el Espíritu Santo.
• Es urgente que tomemos la decisión de cultivar una devoción
personal diaria y ferviente con Dios.
• Solo así podemos esperar un reavivamiento de nuestra fe y de
nuestra pasión por la salvación de las almas que perecen sin Dios y sin
esperanza.

Necesidades Espirituales
• ¿Cuáles son las necesidades espirituales de mis nietos que esta
lección va a satisfacer?

II. Objetivos para los estudiantes
• Los estudiantes:
• (Cognoscitivo) Escucharán la historia de la ascensión y el desafío que
Él le dio a sus seguidores.
• (Afectivo) Sentirán el llamado de Dios a compartir el Evangelio con sus
amigos y familiares que no conocen al Dios de la Biblia.
• (Psicomotriz) Serán desafiados a ir cumplir con la Gran Comisión.

III. Explorar
Doctrina # 4 La Iglesia
Nuestra Creencia # 13
• El Remanente y Su Misión.
• LA IGLESIA UNIVERSAL está compuesta de todos los que creen
verdaderamente en Cristo; pero en los últimos días, una época de
apostasía generalizada, ha sido llamado un remanente para que
guarde los mandamientos de Dios y la fe de Jesús. Este remanente
anuncia la llegada de la hora del juicio, proclama la salvación por
medio de Cristo y pregona la proximidad de la segunda venida. Esta
proclamación está simbolizada por los tres ángeles de Apocalipsis 14;
coincide con la obra del juicio en los cielos y, como resultado, se
produce una obra de arrepentimiento y reforma en la tierra. Se invita
a todos los creyentes a participar personalmente en ese testimonio
mundial.

¿Qué opinas?
• ¿Eres un buen seguidor, o tiendes más bien a ser un líder?
• Clasifícate en una escala del 1 al 10, en la que 1 es “no se parece en nada a mi” y 10 “soy
exactamente así”:
• ____ Dependo de Dios para todas las cosas.
• ____ Mis amigos me dicen que soy muy bueno a la hora de cumplir directivas.
• ____ Si percibo que Dios me está llamando para hacer una cosa la hago sin dudar.
• ____ Suelo pedir consejo a mis padres o a otros adultos.
• ____ Creo que Dios da a conocer su voluntad por medio de su Espíritu
• ____ Me siento feliz de ser una persona de apoyo como parte de un equipo
• ____ Prefiero trabajar con un mentor personal antes que estar al frente de una multitud de
personas.
• ____ Creo que el Reino de Dios se va desarrollando por medio de las relaciones personales, de un
amigo a otro.
• ____ Jamás me preocupo por nada.

Enseñando
I. Para empezar
• Actividad.
• Imaginen la ascensión de Cristo. Mientras ellos cierran sus ojos, usted
lea Lucas 24:50-53 y Hechos1:9-12.
• Deles un minuto de silencio para visualizar la escena.
• Después pida que compartan como ellos piensan que habrían
respondido a la experiencia de ser testigos de la ascensión de Jesús.

II. Enseñando la Historia
Puente hacia la Historia

Explica la Historia para Maestros

¿Lo Sabías?
• Según el sitio de Internet de la Iglesia Evangélica Luterana de Estados
Unidos dedicado a la evangelización por medio de la amistad, las
encuestas indican que aproximadamente el 90% de los conversos
aceptan la fe porque fueron invitados por un “pariente, amigo o
vecino.”

Compartiendo el Contexto
y los Antecedentes.

III. Clausura
• Actividad
• Pida a sus alumnos que tomen tiempo a solas en oración.
• La oración debe enfocarse alrededor de una sola pregunta:
• ¡Oh Dios, ¿Cómo puedo yo cumplir con la Gran Comisión esta
semana?
• De suficiente tiempo para que sus estudiantes esperen en silencio
alguna impresión de parte de Dios.
• Ustedes pueden discutir la experiencia en un grupo más grande si
ustedes desean.

Resumen
• La conclusión es la siguiente:
• Jesús nos llamó a ser agentes de cambio, no observadores de las estrellas.
• ¿Podemos cambiar el mundo para Cristo?
• Nosotros debemos al menos intentarlo.
• Nosotros debemos ir, ya sea cruzando la calle o cruzando el océano, a
hacer discípulos.
• Esta no es una sugerencia; ¡es una orden directa de nuestro Salvador
resucitado!
• ¡Vayamos confiados sabiendo de que Jesús siempre estará con nosotros!
• ¡Yo iré a cumplir con la Gran Comisión con el poder del Espíritu Santo!

Mensaje Evangélico
• ¿Cuáles son las Buenas Noticias de esta lección?
• Jesús resucitó y antes de ascender al cielo nos dejó la Gran Comisión.
• También nos entregó la “promesa de su Padre”: El derramamiento sin
medida del Espíritu Santo que nos capacita para cumplir con esa
maravillosa tarea.

Nuestra Oración Familiar
• Querido Padre Celestial:
• Gracias Señor porque hemos podido estudiar el libro el Deseado de Todas
las Gentes. Gracias Señor porque su mensaje ha impactado nuestra vida.
• Lo terminamos con la Gran Comisión y con la Gran Promesa.
• Ayúdanos a procurar fervientemente un reavivamiento de la verdadera
devoción personal, matinal, cotidiana contigo para que tú nos transformes
y nos capacites para cumplir con la parte que nos toca en esa Gran
Comisión.
• Yo iré con el poder del Espíritu Santo y con tu compañía y cumpliré la tarea
de ir y hacer discípulos empezando con familiares y amigos y con toda
persona con la que tenga contacto en mi vida.
• Amén.

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