La exposición es la cantidad de luz necesaria para obtener una foto correctamente iluminada. Un exposímetro mide la luz reflejada en la escena y determina si falta o sobra luz para la exposición correcta. El fotógrafo debe ajustar el diafragma, la velocidad y la sensibilidad de la cámara para combinar estos tres parámetros y lograr la exposición justa.