La familia del autor viajó a la Ciudad de México durante las vacaciones de Semana Santa para visitar a los tíos de su madre. Pasaron el día visitando a cada uno de los tíos aunque estaban cansados. Fueron a una pista de hielo donde el autor se cayó varias veces antes de agarrar práctica. Asistieron a la boda de un primo aunque fue una celebración pequeña. En su último día, todos los tíos se reunieron para comer y despedir a la familia antes de que regresaran a casa.