Los animales se adaptan a la civilización humana cambiando su alimentación, comunicación y comportamiento. Algunos comen basura humana o comida dada por humanos. También cambian su canto o comportamiento para evitar humanos. Algunas aves usan colillas de cigarro, atraídas por la nicotina, para proteger sus nidos, aunque esto puede dañarlas. Los animales así demuestran su capacidad de sobrevivir adaptándose a los cambios humanos.