Hugo se lastima la pierna jugando fútbol en el parque y conoce a Lara, que usa una silla de ruedas. Aunque al principio piensan que no pueden jugar juntos, Lara le muestra cómo pueden jugar con las manos y se vuelven amigos. Más tarde, cuando los otros niños invitan a Hugo a jugar de nuevo, él lleva a Lara y le enseñan a todos que pueden incluirla en el juego.