L. Alma Tadema fue un pintor holandés del periodo victoriano tardío especializado en escenas clásicas. Nació en los Países Bajos pero alcanzó su máximo esplendor artístico en Londres, donde se caracterizó por reflejar con perfección técnica su pasión por las culturas clásicas a través de pinturas llenas de luz y sensualidad. Su obra cayó en el olvido durante décadas hasta ser revalorizada hace sólo cuatro décadas.