El asesinato de seis sacerdotes jesuitas y dos empleadas de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) ocurrió en la madrugada del 16 de noviembre de 1989 cuando fueron ejecutados por militares del Batallón Atlacatl. Los sacerdotes, incluyendo al rector de la UCA Ignacio Ellacuría, fueron sacados de su residencia y asesinados a tiros. Nueve militares fueron procesados por participar en la orden de asesinar a los sacerdotes.