El documento habla sobre los tres tipos de capital intelectual de una empresa: capital humano, capital estructural y capital relacional. Explica que el capital humano se refiere a las habilidades, conocimientos y experiencia de los empleados, mientras que el capital estructural incluye patentes, bases de datos y procesos. Finalmente, cita a Edvinsson al señalar que una empresa debe enfocarse tanto en los resultados visibles como en los valores intangibles para tener éxito a largo plazo, de manera análoga a cómo un árbol requi