1. Edición No. 074 AÑO DEL REINO DE DIOS JUNIO 2011
EL REINODE DIOS LLAMAA LA CONVERSIÓN
“Nadie remienda un vestido viejo con un pedazo de tela nueva,
porque el pedazo nuevo tiraría del vestido y la rotura se haría
mayor. Y nadie echa vino nuevo en recipientes de cuero viejos,
porque si lo hacen, se reventarán los cueros, el vino se
desparramará y los recipientes se estropearán. El vino nuevo se
echa en cueros nuevos, y así se conservan bien el vino y los
recipientes.” (Mateo 9, 16 - 17)
ACCIÓN SIGNIFICATIVA JUNIO – JULIO
Celebración del Corpus. (Aprovechar los altares del Corpus para
resaltar el valor o el lema del bimestre y resaltar las semillas del
Reino descubiertas en la acción de febrero - marzo). Comité
parroquial de Liturgia.
2. EL REINO DE DIOS LLAMA A LA CONVERSIÓN
Queridos Hermanos y Hermanas: "Conviértanse y crean en el Evangelio" (Mc 1,15).
Recordemos al inicio de este mes, estas palabras que nos dirige Jesús al anunciar la
proximidad del Reino y su condición para recibirlo.
Podemos decir que, ahora nos detenemos en el segundo misterio Luminoso del rosario: “el anuncio del Reino y la
invitación a la conversión”. En efecto, al inaugurar su Reino, Jesús asegura que ha venido para llamar a los
pecadores a la conversión y éste es un aspecto esencial del Evangelio del Reino, de modo que, el hombre que
toma conciencia de su estado de pecador puede volverse a Jesús con confianza, pues "el Hijo del hombre tiene
poder para perdonar los pecados" (Mt 9,6).
Como sabemos, la conversión según la Biblia, significa por una parte, el cambio de conducta práctica y de
mentalidad, y por otra, un volver interior a Dios, es decir al arrepentimiento y aceptación del amor del Padre, como
aparece con tanto énfasis en la parábola del Hijo Pródigo. Podemos fijarnos también en una expresión que es muy
común en la Sagrada Escritura, y es aquella de "conversión del corazón", que significa un cambio integral del ser
para volver la mirada totalmente a Dios, desde lo profundo de la conciencia, de los sentimientos, de las actitudes,
del modo de pensar y decidir.
El mensaje de conversión pronunciado por Jesús, tropieza con la autosuficiencia humana en todas sus formas,
desde el apego a las riquezas hasta la soberbia y seguridad propia de los fariseos, y la consecuencia mayor de esta
situación es lo que el mismo Señor llama, "dureza de corazón" (Mt 13,15), o sea la incapacidad de abrir el alma al
llamado de Dios.
Para aplicar a nuestra vida, de modo que el Reino de Dios arraigue en nuestro corazón, es muy necesario hacer un
examen diligente y confiado, de "adentro hacia fuera", en la presencia de Dios Padre, y con espíritu de conversión
abrir las puertas de par en par al Redentor. Bajo esta luz, también podremos ver cómo está nuestra actitud y nuestro
compromiso con los hermanos, pues es necesario reconocer que la conversión, es hacia Dios y hacia el prójimo. Y
no olvidemos proclamar en este tiempo que "Somos Iglesia en misión, que invita a la conversión".
Con mi fraterno saludo,
† ISMAEL RUEDA SIERRA
Arzobispo de Bucaramanga
COMO DISCÍPULOS MISIONEROS OREMOS
Intención misionera mes
de junio
Para que el Espíritu Santo
haga surgir de nuestras
comunidades numerosas
vocaciones misioneras,
dispuestas a consagrarse
plenamente a la difusión
del Reino de Dios.
Intención particular mes de
junio
Para que los animadores de la
acción pastoral (Obispos, presbíteros,
Diáconos permanentes y transitorios,
Religiosos y Religiosas y fieles laicos)
unidos al Corazón de Cristo,
sean siempre verdaderos
testimonios de una actitud
permanente de encuentro con el
Señor.