Melquíades se encuentra con Andrea, su antiguo amor, en la playa. Él le recuerda cómo ella lo engañó años atrás al irse con otro hombre llamado Andrés mientras Melquíades estaba trabajando fuera. Melquíades le dice a Andrea que sabía que su vida con Andrés solo le traería sufrimiento, y que por eso no la detuvo ni la mató a ella, sino que la dejó ir para que viviera esa vida miserable como venganza por haberlo engañado. Ahora, años después, Melquíades