Las llaves criptográficas son pares de secuencias de caracteres que permiten cifrar y descifrar información. La llave pública solo puede cifrar mientras que la llave privada puede descifrar. La autenticación verifica la identidad de una persona u objeto para permitir el acceso a recursos mediante contraseñas, tarjetas o biometría. Los algoritmos de cifrado como simétricos, asimétricos y hash protegen la información mediante encriptación según las necesidades y características del sistema.