1. Dios es eterno mientras que el hombre es frágil y finito. Aunque Dios ve los pecados del hombre, ofrece misericordia a través de Cristo. 2. Debemos comprender el poder de la ira de Dios y no malgastar nuestras vidas breves en cosas vanas. 3. Se nos pide contar nuestros días y vivir con una perspectiva de la eternidad, enfocándonos no en lo temporal sino en lo que es eterno y agradando a Dios.

1. CON UNA PERSPECTIVA
DE LA ETERNIDAD

2. Señor, tú nos has sido refugio
De generación en generación.
2 Antes que naciesen los montes
Y formases la tierra y el mundo,
Desde el siglo y hasta el siglo, tú eres Dios.
3 Vuelves al hombre hasta ser quebrantado,
Y dices: Convertíos, hijos de los hombres.
4 Porque mil años delante de tus ojos
Son como el día de ayer, que pasó,
Y como una de las vigilias de la noche.

3. 5Los arrebatas como con torrente de aguas;
son como sueño,
Como la hierba que crece en la mañana.
6 En la mañana florece y crece;
A la tarde es cortada, y se seca.
7 Porque con tu furor somos consumidos,
Y con tu ira somos turbados.
8 Pusiste nuestras maldades delante de ti,
Nuestros yerros a la luz de tu rostro.

4. 9 Porque todos nuestros días declinan a causa de tu ira;
Acabamos nuestros años como un pensamiento.
10 Los días de nuestra edad son setenta años;
Y si en los más robustos son ochenta años,
Con todo, su fortaleza es molestia y trabajo,
Porque pronto pasan, y volamos.
11 ¿Quién conoce el poder de tu ira,
Y tu indignación según que debes ser temido?
12 Enséñanos de tal modo a contar nuestros días,
Que traigamos al corazón sabiduría.

5. 1. LA ETERNIDAD DE DIOS Y LA FRAGILIDAD DEL
HOMBRE
• Antes que Dios formara esta tierra y este universo, Él
estaba aquí. Desde el siglo y hasta el siglo Él es Dios y
nunca ha dejado de serlo, pero no podemos entenderlo
porque eso está más allá́ de nuestra capacidad intelectual.
• Dios es siempre el mismo. «Porque yo Jehová́ no cambio»
(Mal 3.6). «Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los
siglos» (Heb 13.8).

6. • Después de haber visto tanta gente
morir en el desierto Moisés se
encuentra con esta realidad. Dios es
eterno, pero el hombre no, y sin
Dios el hombre no es nada.
• Si no fuera por el pecado, no habría
muerte ni decadencia en nuestro
mundo. Debemos recordar como
dice Romanos 6:23 “…la paga del
pecado es muerte.” Cuando Adán y
Eva pecaron en el huerto del Edén el
juicio de Dios vino sobre la
humanidad

7. !HAGAMOS UN ALTO Y RESPONDAMOS!
• ¿Cuál es su perspectiva de su vida aquí en la
tierra?
• ¿Desde cual punto de vista toma usted sus
decisiones?
• ¿Pensando en que, maneja usted sus
relaciones?

8. 2. LA SANTIDAD DE DIOS Y LOS PECADOS DEL HOMBRE (90.7–
12)
• Si bien es cierto que nosotros a través de la obra de Cristo
fuimos librados de la Ira venidera de Dios, El observa
nuestra vida y si esta no es conforme a su voluntad vienen
sus justos juicios. Con Dios no podemos jugar. ¿Quien
entiende el poder de la ira de Dios? Si lo
comprendiéramos, no desperdiciaríamos nuestras vidas
como lo hacemos, en empresas inútiles.
• ¿Quien entiende el poder de la ira de Dios?

9. 3.CON UNA PERSPECTIVA DE LA ETERNIDAD (VERSO 12)
• Cuente sus días y haga que su vida valga. Debemos temer a Dios y
honrarle en la corta vida que tenemos .
• ¿A dónde ponemos el énfasis en nuestras vidas, en lo terrenal o
lo eterno?
• Como creyentes debemos tener una perspectiva de la eternidad,
esto significa comprender que lo hacemos en esta vida cuenta
para la eternidad, de manera que debemos vivir en una forma
digna de los Hijos de Dios mientras estemos en esta tierra, sin
olvidar que lo más importante es nuestra vida con Dios en la
eternidad.

10. • Pues tengo por cierto
que las aflicciones del
tiempo presente no son
comparables con la
gloria venidera que en
nosotros ha de
manifestarse.
• Romanos 8:18

11. ¿Quién entiende el poder de la ira de Dios?
Si lo comprendiéramos, no
desperdiciaríamos nuestras vidas como
muchas veces lo hacemos, ponemos más
énfasis en lo que es terrenal y no en lo que es
eterno. Debemos temer a Dios, honrarle y
usar nuestras breves vidas para su gloria.