La criptografía asimétrica usa pares de claves públicas y privadas para cifrar y descifrar mensajes, de modo que sólo el destinatario pueda leerlos. Se basa en funciones matemáticas de un solo sentido como la factorización de números primos, lo que hace difícil descifrar sin la clave privada. Aunque más lenta que los métodos simétricos, la criptografía asimétrica permite el intercambio seguro de claves sin contacto previo.