El cuento trata sobre un ratón de campo que visita a su primo el ratón de ciudad. Aunque la vida del ratón de ciudad parece más lujosa, con quesos y comidas refinadas, el ratón de campo se da cuenta de que en la ciudad hay mucho ruido, peligros como gatos y personas con escobas intentando darles, y menos tranquilidad. El ratón de campo decide que prefiere su vida simple pero pacífica en el campo.
Taller de comprensión lectora: El lobo sentimentalyanvas77
Comprensión lectora para los grados segundo y tercero de básica primaria, después de leer: El lobo sentimental, tienen un taller de análisis y comprensión de lectura.
Taller de comprensión lectora: El lobo sentimentalyanvas77
Comprensión lectora para los grados segundo y tercero de básica primaria, después de leer: El lobo sentimental, tienen un taller de análisis y comprensión de lectura.
Max es un niño travieso y sensible que se siente incomprendido en casa y un día decide fugarse en una pequeña barca. Max llega a una isla donde se encuentra con misteriosas criaturas, cuyas emociones son tan salvajes e imprevisibles como sus acciones. Los monstruos buscan desesperadamente un líder que les guíe, igual que Max desea un reino que gobernar. Cuando Max es coronado monarca, promete crear un lugar donde todo el mundo sea feliz. Sin embargo, pronto se da cuenta de que gobernar su reino no es una tarea tan fácil y que sus relaciones allí resultan ser más complicadas de lo que pensó al principio.
Un día de primavera dos tortugas, una se llamaba Arturo y otra Clementina, se conocieron y ese mismo día descubrieron que estaban enamorados.
Pescaban juntos para la cena, pero un día Arturo decidió pescar solo para que Clementina descansara. Cuando Arturo volvió ella le dijo que se había aburrido sin él y Arturo contestó que hiciera algo, que aburrirse era de tontos. Clementina le dijo a Arturo que quería tocar la flauta, que así se entretendría, pero Arturo le contestó que no sabía distinguir las notas, así que le regaló un tocadiscos.
Clementina se empezó a aburrir con el tocadiscos y un atardecer, junto a la orilla, dijo que quería pintar y Arturo se burlaba diciendo que no era artista.
Clementina pensaba que si decía más tonterías Arturo se cansaría de tener una mujer (tortuga) tan tonta.
Pocos días después Arturo se presentó con un cuadro y se lo añadió a su montaña de objetos.
La carga de Clementina era cada vez más alta, tan alta que hacía ya tiempo que se había convertido en un rascacielos.
Un día de primavera Clementina se dio cuenta de que eso no podía seguir así, por lo que salió de la casa a dar un paseo, le pareció hermoso pero muy corto porque cuando volviera Arturo debía encontrarla allí, como siempre, esperándole.
Pero poco a poco el paseíto fue convirtiéndose en una costumbre y cada vez se sentía más feliz. Arturo le decía de qué se reía y que parecía tonta, aunque a Clementina eso ya no le importaba. Y cada vez que Arturo se daba la vuelta la veía más extraña.
Un día Arturo se encontró la casa vacía y se enfadó muchísimo y años más tarde seguía contándoles a sus amigos que Clementina era una ingrata, con los de tesoros que tenía.
COMISIÓN NACIONAL DE LOS LIBROS DE TEXTO GRATUITOS
DEPENDIENTE DE LA SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PUBLICA
Doctor Río de la Loza, Núm. 116, México 7, D. F.
® Diciembre de 1960
Max es un niño travieso y sensible que se siente incomprendido en casa y un día decide fugarse en una pequeña barca. Max llega a una isla donde se encuentra con misteriosas criaturas, cuyas emociones son tan salvajes e imprevisibles como sus acciones. Los monstruos buscan desesperadamente un líder que les guíe, igual que Max desea un reino que gobernar. Cuando Max es coronado monarca, promete crear un lugar donde todo el mundo sea feliz. Sin embargo, pronto se da cuenta de que gobernar su reino no es una tarea tan fácil y que sus relaciones allí resultan ser más complicadas de lo que pensó al principio.
Un día de primavera dos tortugas, una se llamaba Arturo y otra Clementina, se conocieron y ese mismo día descubrieron que estaban enamorados.
Pescaban juntos para la cena, pero un día Arturo decidió pescar solo para que Clementina descansara. Cuando Arturo volvió ella le dijo que se había aburrido sin él y Arturo contestó que hiciera algo, que aburrirse era de tontos. Clementina le dijo a Arturo que quería tocar la flauta, que así se entretendría, pero Arturo le contestó que no sabía distinguir las notas, así que le regaló un tocadiscos.
Clementina se empezó a aburrir con el tocadiscos y un atardecer, junto a la orilla, dijo que quería pintar y Arturo se burlaba diciendo que no era artista.
Clementina pensaba que si decía más tonterías Arturo se cansaría de tener una mujer (tortuga) tan tonta.
Pocos días después Arturo se presentó con un cuadro y se lo añadió a su montaña de objetos.
La carga de Clementina era cada vez más alta, tan alta que hacía ya tiempo que se había convertido en un rascacielos.
Un día de primavera Clementina se dio cuenta de que eso no podía seguir así, por lo que salió de la casa a dar un paseo, le pareció hermoso pero muy corto porque cuando volviera Arturo debía encontrarla allí, como siempre, esperándole.
Pero poco a poco el paseíto fue convirtiéndose en una costumbre y cada vez se sentía más feliz. Arturo le decía de qué se reía y que parecía tonta, aunque a Clementina eso ya no le importaba. Y cada vez que Arturo se daba la vuelta la veía más extraña.
Un día Arturo se encontró la casa vacía y se enfadó muchísimo y años más tarde seguía contándoles a sus amigos que Clementina era una ingrata, con los de tesoros que tenía.
COMISIÓN NACIONAL DE LOS LIBROS DE TEXTO GRATUITOS
DEPENDIENTE DE LA SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PUBLICA
Doctor Río de la Loza, Núm. 116, México 7, D. F.
® Diciembre de 1960
Este dulce personaje ha viajado por algunos hogares de los chicos y chicas de 1º "B" y llegó a la escuela la versión familiar para que todos la disfrutemos.
¡ Gracias a las familias que participaron!
2. ÉRASE UNA VEZ UN RATÓN QUE VIVÍA EN UNA HUMILDE
MADRIGUERA EN EL CAMPO. ALLÍ, NO LE HACÍA FALTA
NADA. TENÍA UNA CAMA DE HOJAS, UN CÓMODO SILLÓN, Y
FLORES POR TODOS LOS LADOS.
3. CUANDO SENTÍ HAMBRE EL RATÓN BUSCABA FRUTAS
SILVESTRES, FRUTOS SECOS Y SETAS PARA COMER. LLEVABA
UNA VIDA MUY TRANQUILA Y FELIZ.
4. UN DÍA, SU PRIMO RATÓN QUE VIVÍA EN LA CIUDAD LO FUE
A VISITAR. EL RATÓN DE CAMPO LE INVITÓ A COMER SOPA
DE HIERBAS, PERO AL RATÓN DE CIUDAD, ACOSTUMBRADO
A COMER COMIDAS MÁS REFINADAS, NO LE GUSTÓ. Y
ADEMÁS NO SE HABITUÓ A LA VIDA DE CAMPO. Y ACABÓ
INVITANDO A SU PRIMO A VIAJAR CON ÉL A LA CIUDAD
PARA COMPROBAR QUE ALLÍ SE VIVE MEJOR. EL RATÓN DE
CAMPO CEDIÓ, ANTE LA INSISTENCIA DE LA INVITACIÓN.
5. NADA MÁS LLEGAR A LA CIUDAD, EL RATÓN DE CAMPO
PUDO SENTIR QUE SU TRANQUILIDAD SE ACABABA. HABÍA
PELIGROS POR TODAS PARTES. MUCHO RUIDO DE AUTOS Y
MUCHAS PERSONAS. LA MADRIGUERA DE SU PRIMO ERA
MUY DISTINTA A LA SUYA. ESTABA EN EL SÓTANO DE UN
HOTEL.
6. ERA TODO MUY ELEGANTE, LOS ARMARIOS REBOSABAN DE
QUESOS Y OTRAS COSAS RICAS. CUANDO LOS DOS RATONES
SE DISPONÍAN A DARSE UN BUEN BANQUETE, VIERON N
GATO, Y SALIERON CORRIENDO. MIENTRAS HUÍAN, EL
RATÓN DE CAMPO OYÓ LOS GRITOS DE UNA MUJER, QUE
CON UNA ESCOBA INTENTABA DARLES CON EL PALO EN LA
CABEZA.
7. EL RATÓN MÁS QUE ASUSTADO Y HAMBRIENTO, DIJO ADIÓS
A SU PRIMO Y DECIDIÓ VOLVER AL CAMPO LO ANTES QUE
PUDO. DE VUELTA A SU CASA EL RATÓN DE CAMPO PENSÓ
QUE JAMÁS CAMBIARÍA SU PAZ POR UN MONTÓN DE COSAS
MATERIALES.