En la Primera Convención Ambiental, representantes de ecosistemas de todo el planeta se reunieron para expresar sus problemas causados por la mala conducta humana. Varios representantes, incluyendo el cóndor, oso polar, elefante y canguro, se quejaron de cómo las acciones humanas amenazan sus hábitats y especies. Los seres abióticos como el suelo, río y aire también expresaron sus preocupaciones sobre la contaminación y explotación causadas por la humanidad. Al final, el hombre aceptó su culpa y prometió cambiar