El documento establece una serie de derechos fundamentales que deben tener todos los niños y niñas, incluyendo el derecho a la vida, la educación y la alimentación, independientemente de su sexo, color, religión u otras características. Asimismo, señala que los niños deben ser protegidos contra el racismo y recibir atención especial en caso de enfermedad o peligro.