El drifting es un estilo de conducción en el que el vehículo derrapa de manera controlada a alta velocidad formando un ángulo con la dirección. Se practica especialmente en campeonatos donde se compite por estilo más que por tiempo. Existen diferentes técnicas como usar el freno de mano, cambiar de marcha o acelerar en curva para inducir el derrape controlado, y autos como el BMW Serie 3 E30/E36, Nissan Silvia o Mazda RX-7 son ideales para principiantes.