Dos aves nocturnas, una lechuza y un katekate, discuten en una cueva sobre cuál de las dos es mejor para anunciar la muerte a los humanos. La lechuza dice que visita personalmente a los moribundos, mientras que el katekate dice que anuncia la muerte cantando de forma diferente para hombres y mujeres. Llega un zorrino que los escucha y les dice que él también es un anunciador de muerte, mostrándoles como orina para luego huir y dejar a las aves avergonzadas.