El consejo de administración del Banco Santander nombró a José Antonio Álvarez como nuevo consejero delegado, sustituyendo a Javier Marín. También incorporó tres nuevos consejeros independientes, incluido Bruce Carnegie-Brown como consejero coordinador. Se produjeron cambios en la alta dirección, con José García Cantera sustituyendo a Álvarez y Jacques Ripoll sustituyendo a García Cantera.