El documento describe el diálogo interreligioso como una interacción positiva y constructiva entre personas de diferentes tradiciones religiosas que es fundamental para la paz mundial. Explica que el diálogo interreligioso requiere formarse para comprender otras perspectivas, reconocer las diferencias con respeto y crear puentes de entendimiento. También destaca el ejemplo de San Francisco de Asís quien promovió el diálogo pacífico con personas de otras religiones.