El incidente de la tajada de sandía ocurrió en 1856 en Panamá y dio lugar a la primera intervención estadounidense. Jack Olivier, estadounidense ebrio, se negó a pagar por una tajada de sandía, disparó a un panameño e inició una pelea entre panameños y estadounidenses. Como resultado, Estados Unidos ocupó brevemente la estación de ferrocarril panameña y exigió una indemnización a Nueva Granada, quien aceptó su culpabilidad en el Tratado