2. Es un metal pesado, importante
tóxico ambiental que ocasiona
daños en la salud humana.
Es un potente neurotóxico que
puede afectar el sistema
nervioso central, reproductivo,
renal , hepático y respiratorio.
3. A nivel hospitalario, el Mercurio se
encuentra en numerosos elementos
como instrumental (termómetros,
tensiómetros y dilatadores esofágicos),
equipos de medición, limpiadores y
compuestos químicos usados en
laboratorio Cuando estos productos se
derraman, rompen o tienen una
disposición final incorrecta, provocan
un daño potencial significativo para la
salud de los seres humanos y el
ambiente.
4. Toxicidad del Mercurio
La ruta mas común de
exposición es por inhalación
de vapores de hg inorgánico
después de un derrame o
por la ingesta de alimentos
contaminados por mercurio.
5. El Mercurio tiene numerosos efectos
sobre el organismo humano, que pueden
ser simplificados en las siguientes
principalmente:
principalmente:
•Daño al sistema nervioso
•Daño a las funciones cerebrales
•Daño al ADN y cromosomas
•Reacciones alérgicas, irritación de la
piel, cansancio, y cefalea.
•Efectos negativos en la reproducción,
daño en el esperma, defectos de
nacimientos y abortos
6. El daño a las funciones cerebrales
pueden causar la degradación de la
habilidad para aprender, cambios en la
personalidad, temblores, cambios en la
visión, sordera, incoordinación de
músculos y pérdida de la memoria.
Daño en el cromosoma, por ejemplo: es
una de las causas del trisomía 21,
alteración genética conocida como
síndrome de Down.
7. Las personas quedan expuestas al
mercurio elemental cuando se
rompen dispositivos médicos que
lo contienen, y también cuando el
mercurio líquido se derrama o se
evapora mientras se están
llenando sondas Bougie u otros
dispositivos. Algunos
instrumentos, como los
esfigmomanómetros, contienen
una cantidad considerable de
mercurio.
8. •Los derrames de mercurio en
hospitales, clínicas y laboratorios
plantean riesgos tanto para los
trabajadores de la salud como
para los pacientes.
•Las vías de exposición más
comunes son por inhalación o por
contacto con la piel.
• El riesgo de exposición al
mercurio es más alto en las
habitaciones caldeadas o mal
ventiladas.
9. •El uso de productos y dispositivos
con mercurio en los hospitales
también puede afectar entornos
más alejados con los que pueden
entrar en contacto ulteriormente.
•Los desechos hospitalarios que
contienen mercurio, incluso los
restos que pueden quedar
después de la limpieza de un
derrame, pueden llegar a medios
acuáticos y a la atmósfera debido
a una eliminación incorrecta.