El documento habla sobre el ruido como sinónimo de contaminación acústica, refiriéndose a sonidos con alta intensidad que pueden ser perjudiciales para la salud humana. Contra el ruido excesivo se usan tapones para los oídos y orejeras, las cuales contienen electrónica para disminuir los ruidos externos y evitar la pérdida de audición o la sordera.