Los nuevos directores y subdirectores asignados para enero y febrero se han encontrado con graves problemas al asumir sus cargos. Muchos directores salientes se niegan a entregar el cargo alegando que sus plazas serán judicializadas. Además, los instrumentos de gestión como el cuadro de horas, el plan anual de trabajo y otros documentos fueron dejados incompletos, dificultando la labor de los nuevos directivos. Muchas instituciones educativas tampoco han cerrado procesos como las notas finales y el registro de matrículas