Para ensamblar el microprocesador y el disipador de calor, se inserta el microprocesador en el sócalo y se asegura con la palanca de sujeción. Luego se coloca la pasta térmica encima y se ubica el disipador, presionando los seguros y girándolo hasta que la ranura quede perpendicular, conectando finalmente el cable HSF al puerto correspondiente.