La materia puede presentarse en cuatro estados: sólido, líquido, gaseoso y plasmático. En el estado sólido, las moléculas están muy juntas y ordenadas con forma y volumen fijos. En el estado líquido, las moléculas están algo separadas y pueden moverse con más facilidad tomando la forma del recipiente. En el estado gaseoso, las moléculas están muy separadas moviéndose en cualquier dirección con forma y volumen variables y capacidad de compresión.