Ensayo matrimonio entre personas del mismo sexo informatica
Estar a favor o en contra del matrimonio igualitario
1. ¿Estar a favor o en contra del matrimonio igualitario?
Defender el derecho a la igualdad ante la ley, es la prioridad para la justicia colombiana, no siempre se
cumple, pero en su gran mayoría la justicia colombiana lo pretende. El matrimonio igualitario para parejas
del mismo sexo ha generado una gran controversia en los miembros del congreso, problema que se ha
trasladado al resto del país y ha tomado iniciativas de movimientos a favor y en contra. El problema no es
que se acepte el matrimonio igualitario, sino que este es un paso hacia la adopción de niños y niñas por
parte de parejas homosexuales. A mi parecer –en mi opinión claro está- no estoy de acuerdo con el
matrimonio igualitario ni con la adopción de niños y niñas por parte de parejas homosexuales. Pero si estoy
a favor de que los derechos civiles de dichas parejas se tomen muy en cuenta, principalmente que se
registren públicamente sus amistades íntimas como uniones de hecho en el marco de la protección de la
seguridad social.
Ahora definamos el concepto de matrimonio y familia según la ley y el ámbito religioso.
El matrimonio según el artículo 113 del código civil es un contrato solemne por el cual un hombre y una
mujer se unen con el fin de vivir juntos, de procrear y de auxiliarse mutuamente. Ahora bien, esta definición
se compara con lo que se denomina familia, y la familia según el artículo 42 de la constitución política es: el
núcleo fundamental de la sociedad. Se constituye por vínculos naturales o jurídicos, por la decisión libre de
un hombre y una mujer de contraer matrimonio o por la voluntad responsable de conformarla. Según el
ámbito religioso el matrimonio se debe dar solo entre parejas de diferente sexo, hombre y mujer. ¿Qué dice
la biblia?, la biblia define el matrimonio como la unión de un hombre y una mujer, que dejan de ser dos
carnes para convertirse en una sola, la biblia dice: “Y puso Adán nombre a toda bestia y ave de los cielos y
a todo ganado del campo; más para Adán no se halló ayuda idónea para él.” (Génesis 2:20). Las palabras
“ayuda e idónea” son la misma palabra en hebreo. La palabra es “ezer” y viene de la raíz primitiva de la
palabra que significa rodear, proteger, ayudar, auxiliar, socorrer. Por lo tanto, significa ayudar, asistir o
auxiliar. Eva fue creada para estar al lado de Adán como su “otra mitad”, para ser su auxilio y ayuda. Un
hombre y una mujer cuando se casan, se convierten en “una sola carne”. El Nuevo Testamento añade una
advertencia a esta “unidad”. “Así que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios juntó,
no lo separe el hombre” (Mateo 19:6). La similitud que hay entre el texto bíblico y lo que el código civil
expresa, concluye que el artículo 113 se basa en los pensamientos cristianos, los cuales son aceptados por la
mayoría de ciudadanos y que además forman parte de la religión adoptada por nuestro país.
Los homosexuales pueden casarse, como cualquier persona, no se discrimina que muchos no quieran
hacerlos. Pueden casarse con los mismos derechos que los heterosexuales, es decir, solo con otra persona y
solo del sexo opuesto. Defender la idea del matrimonio homosexual es como defender la idea del polígamo,
aquel que quiera casarse con varias mujeres puede quejarse de discriminación.
Casar homosexuales es un experimento social inédito. Casar personas del mismo sexo es un experimento
social que nunca antes se ha intentado. Ninguna civilización ha implantado el matrimonio homosexual.
Incluso sociedades que permitían la homosexualidad y hasta la fomentaban en ciertas edades y clases
sociales, como los griegos antiguos, entendían claramente el matrimonio como la unión estable entre un
hombre y una mujer abiertos a tener hijos. Una cosa eran las prácticas sexuales de los ciudadanos y otra
muy distinta la familia y la generación y educación de hijos. La homosexualidad ha adoptado muchas formas
en distintas sociedades, pero nunca se le ha relacionado con el matrimonio. Experimentar con el modelo
social es irresponsable y peligroso.
2. No existe el gen homosexual. El homosexual no nace, se hace. No se ha podido demostrar científicamente
que la homosexualidad esté ligada a la herencia genética o que la tendencia a ser homosexual esté
determinada desde el nacimiento. Sí que se ha demostrado y es defendido por un amplio y respetable
sector científico que la prevalencia de la tendencia homosexual obedece a factores ambientales y está
condicionada por la propia psicología y la educación.
Para evitar abusos contra /entre homosexuales o el desamparo legal no hace falta aprobar el matrimonio
homosexual. Casi todos los beneficios de un matrimonio a nivel de herencias, transmisión de bienes,
propiedades compartidas, etc., pueden regularlo dos (o más) personas con acuerdos legales ante notario,
independientemente de que tengan relaciones sexuales. De hecho, las pocas parejas homosexuales
realmente interesadas en estos temas ya han establecido acuerdos así.
En realidad, pocos homosexuales se casan; el objetivo del movimiento gay es destruir el matrimonio
heterosexual. Lo han reconocido muchas veces los líderes homosexuales en España y en el resto del mundo.
En realidad muy pocos de ellos quieren "casarse". Pero el movimiento del homosexualismo político se
vuelca en la exigencia del matrimonio para cambiar la sociedad y eliminar una institución (el matrimonio
monógamo y de por vida) en la que no creen.
Legalizar el matrimonio homosexual significa legalizar la entrega de niños a homosexuales. Hay gente que
dice "yo veo bien que los gays se casen pero no que adopten niños". Es un error pensar que se va a legalizar
el matrimonio sin la adopción: si se legaliza el matrimonio incluirá siempre la adopción. Quien apoye una
cosa estará apoyando, quiera o no, la otra porque nuestro derecho permite adoptar conjuntamente a los
cónyuges.
Legalizar el matrimonio homosexual implicará a medio plazo multas y penas de cárcel para quien critique la
actividad homosexual. En Suecia, donde hay uniones gay desde 1995 con adopción de niños desde 2002, se
decretó pena de cárcel para un pastor luterano que se limitaba a predicar las palabras de San Pablo sobre la
homosexualidad
La mayoría de estos argumentos no han sido de índole religiosa. Permitir el matrimonio homosexual y la
adopción de niños por homosexuales es atentar contra las familias y supone un grave daño a los niños y a la
sociedad entera.
No hay discriminación: la ley es igual para todos y la sociedad tiene un modelo de matrimonio que ha
demostrado su eficacia durante siglos.
Oscar Alberto Burbano Meneses
CC: 1085921068
Grupo numero 3