2. 2.-Coloque la tapa y el frasco boca abajo en una olla con agua suficiente para cubrirlos, y tápela. Hiérvalos durante 15 minutos a fuego medio.
3. 3.-Deje enfriar el agua y saque el frasco y la tapa tomándolos con unas pinzas de cocina o dos cubiertos limpios, para que no tengan contacto directo con sus manos.
4. 4.- Coloque el frasco y la tapa boca abajo sobre una manta limpia para que escurran y se sequen. Nunca emplee un trapo para secarlos porque pueden contaminarse nuevamente.