Francisco I de Francia promovió el Renacimiento en el siglo XVI y fue mecenas de artistas como Leonardo da Vinci. Gobernó desde 1494 a 1547 y encargó la construcción y remodelación de castillos reales como Fontainebleau, Blois y Chambord. Enrique IV, llamado "el buen rey", gobernó desde 1589 a 1610 y fue conocido por proyectos urbanísticos en París como el Pont Neuf y la Place des Vosges. Ambos monarcas desempeñaron un papel importante en la arquitectura frances