Los cuatro códices mayas que existen son el Códice Dresde, Madrid, París y Grolier. Fueron hechos de la corteza interna del árbol de higo tratada con cal y escritos con tinta negra, roja, azul y otros colores. Los códices sobrevivieron a la destrucción europea y daños de guerra y ahora se encuentran en Dresde, Madrid, París y México.