El petróleo es un combustible fósil que se formó hace millones de años a partir de los restos de animales, plantas, bacterias y algas. Se extrae mediante la perforación de pozos en los yacimientos petrolíferos ubicados debajo de la tierra y el mar. Siendo un recurso no renovable, es necesario utilizarlo con moderación dado que llevaría millones de años renovar las reservas actuales.