Los tres magos emprendieron un viaje de búsqueda siguiendo una estrella para encontrar a Jesús recién nacido. Encontraron a Jesús y luego regresaron a sus hogares por un camino diferente, ya que habiendo encontrado a Dios, no podían continuar por los mismos caminos de antes. La fe a veces implica períodos de luminosidad y oscuridad en el camino, pero incluso en la oscuridad Dios puede guiarnos si estamos abiertos a escuchar su llamado.