El documento describe los hundimientos ocurridos en Guatemala entre 2007 y 2010. El autor propone varias hipótesis para explicar los hundimientos, incluyendo la existencia de antiguas cavernas subterráneas o un río subterráneo. También sugiere que el agrietamiento del subsuelo debido al peso y filtraciones de agua, combinado con el aumento del flujo de aguas pluviales y de drenaje, pudo haber causado la saturación y colapso del suelo, resultando en los hundimientos.