Este documento trata sobre la instrucción y la evaluación en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Explica que la instrucción implica impartir conocimiento de manera estructurada o informal y que la evaluación debe realizarse de forma secuencial, incluyendo las etapas de diagnóstico, formativa y sumativa. También señala que la secuencialidad es importante en la instrucción para que el aprendizaje sea progresivo y significativo.