La intoxicación por insecticidas puede ocurrir por ingestión, inhalación o absorción a través de la piel de sustancias como los organofosforados y carbamatos. Los síntomas incluyen lagrimeo, tos, problemas respiratorios y cardíacos. El diagnóstico se basa en los síntomas y la exposición reportada, y puede confirmarse con análisis de sangre. El tratamiento implica retirar la ropa contaminada, apoyar las funciones respiratoria y cardíaca, y administrar atropina y pralidoxima intravenos