La economía boliviana depende principalmente de la extracción y exportación de materias primas. Aunque tiene un superávit comercial con el Mercosur y la Comunidad Andina debido a las exportaciones de petróleo, azúcar y leche, tiene un déficit con Chile por mayor importación de combustibles. Las reservas internacionales de Bolivia alcanzaron un récord de 10.200 millones de dólares en enero de 2010, lo que mejoró su calificación crediticia a nivel internacional.