2. La mítica Hiperbórea, el continente más allá del norte
Según la mitología griega, Hiperbórea era una región que
se situaba más allá de Tracia, ciudad donde
supuestamente vivía Bóreas, el viento del norte. Se
trataba de una tierra mágica donde siempre era de día y
brillaba el sol, y cuyos habitantes, que podían vivir hasta
mil años, eran eternamente felices, libres de la vejez, de
la enfermedad y de la guerra.
3. Era prácticamente imposible llegar hasta allí,
ya que este enigmático paraíso estaba
custodiado por poderosas razas de semidioses
que cuidaban de los hiperbóreos y era
protegido por enormes muros de hielo
transparente. Apolo, dios de la luz, era el único
que recibía culto en Hiperbórea, donde se
marchaba para pasar los largos inviernos. Por
eso se supone que los hiperbóreos eran
parecidos a él: rubios, altos y hermosos.
Hay muchas leyendas que hablan de los
habitantes de estas tierras. Abaris, por
ejemplo, era un sacerdote de Apolo
hiperbóreo, que se marchó de su país y
recorrió el mundo curando a la gente con su
magia. El héroe Heracles, al llevar a cabo uno
de sus doce trabajos, tuvo que perseguir a la
Cierva de Cerinia hasta el país de los
hiperbóreos, donde ésta se detuvo y al fin fue
capturada.
4. Otro mitos griegos y romanos parecen referirse
también a Hiperbórea. Hesiodo habla de una isla
al norte del mundo donde los héroes vivían
eternamente, gobernados por Cronos. Otras
leyendas mencionan una isla Blanca donde los
héroes como Aquiles son llevados después de la
muerte. Por otro lado, existe la mítica isla de
Thule, situada en el Polo Norte, más allá del
mundo conocido por los griegos y romanos.
5. Existen otros pueblos que tienen mitos que encajan con la
leyenda de Hiperbórea. Por ejemplo, los celtas irlandeses
cuentan que descienden de un pueblo llamado los Tuatha
Dé Danann, los hijos de Dana, que llegaron a las islas
Británicas huyendo del naufragio de su civilización
agonizante, situada en alguna isla al norte del océano. Los
hindúes también hablan de una isla Resplandeciente
situada al norte del mundo, donde habitaría el dios Visnú.
Los persas, por su...
parte, pensaban que su raza provenía de una isla situada al
norte
6.
7. Así que ya se trate de Lemuria, Mu, la Atlántida
o Hiperbórea, casi todas las culturas del mundo
tienen leyendas que hablan de un continente
desaparecido cuyos habitantes poseían una
civilización superior.
Los nazis cultivaron una vertiente esotérica que
intentaba explicar enigmas tan distintos como
el Santo Grial, el Arca de la Alianza o la
existencia de la Atlántida. Una de sus leyendas
favoritas era la de Hiperbórea, ya que pensaban
que la raza aria era descendiente de los dioses
rubios, hermosos e inmortales que habitaban al
norte del mundo. Según la explicación nazi,
Thule sería la capital de esa mítica Hiperbórea.
8.
9. El filósofo Nietzsche aseguró en algunos de sus libros
que era descendiente moral de los hiperbóreos, a los
que identifica con su famoso “superhombre”.
Groenlandia e Islandia serían vestigios geológicos de
ese fabuloso continente hiperboreal, que disfrutaba de
un clima tropical con una vegetación extraordinaria.
Los importantes yacimientos de carbón fósil bajo el
hielo de estas islas demuestran que allí se desarrolló
una exuberante vegetación. Curiosamente, Groenlandia
significa “tierra verde”. ¿Quizás este continente existió y
no es sólo una leyenda?
Con el tiempo los hiperbóreos emigraron a tierras más
meridionales, mezclándose con otras etnias y
habitantes de diferentes regiones del planeta, como
Islandia. De esta manera lograron sobrevivir a la
glaciación del periodo cuaternario. Pero cuando los
irlandeses llegaron a Islandia en el año 795 y los
vikingos en el año 874, hallaron que la isla estaba
despoblada. Posiblemente sus habitantes
desaparecieron debido a algún desastre sísmico o
volcánico, que les obligó a realizar un éxodo a las tierras
continentales de Europa. Otras versiones apuntan que
la causa de la huida de su población se debió a un
cambio de posición del eje terrestre a causa de la
transgresión humana en la ley divina.