La Segunda Guerra Mundial tuvo un gran impacto en el conflicto árabe-israelí. Mientras que la mayoría de los judíos palestinos apoyaron a los británicos, el Gran Muftí de Jerusalén se alió con los nazis. Tras la guerra, el Holocausto aumentó el apoyo a la causa sionista, pero los británicos continuaron prohibiendo la inmigración judía debido a sus intereses en los países árabes. Esto llevó a ataques de grupos judíos como el Irgún y