Este cuento habla de un rey moribundo con cuatro esposas que representan el cuerpo, las posesiones, la familia y el alma. Cuando el rey le pregunta a cada esposa si lo acompañará después de morir, las tres primeras se niegan, mientras que la primera esposa, que representa el alma, acepta ir con él. El cuento enseña que al morir solo el alma nos acompañará y que debemos cultivarla y fortalecerla por sobre otras cosas.