Las termas romanas servían para que los romanos se bañaran y relajaran. Había baños de distintas temperaturas - fríos, tibios y calientes - y hornos que mantenían el agua caliente. Los bañistas sudaban en la sala caliente y luego pasaban a la templada y la fría, donde se sumergían, para tonificar la piel de forma higiénica. Las termas tenían hornacinas para dejar la ropa y recoger toallas.
3. • Las termas romanas servian para que los
romanos se bañasen y se relajasen.
• Había termas de distintos tipos frías , tibias y
calientes
• Junto a ellas estaban los hornos que
mantenían los baños en funcionamiento. Tras
sudar en ella el bañista volvía a la sala
templada y de allí pasaba a la sala fría donde
se daba un chapuzón en la piscina. El
contraste entre frío y calor tonificaba la piel y
resultaba muy higiénico.
4. Detalle de las hornacinas en cuyo interior,
dentro de unos pequeños armarios de
madera, los bañistas dejaban la ropa y
recogían la toalla y las sandalias para
caminar por las salas con calor.
5. .
• Aquí puedes ver muy bien cómo la sala
caliente y la sala templada de las termas de
Los Bañales tenían un falso suelo bajo el cuál
circulaba el aire .