La niña Graciela solía poner apodos a sus compañeros de clase, lo que los molestaba. Un día, sus compañeros decidieron darle una lección poniéndole varios apodos a ella para que entendiera cómo se sienten cuando los apodan. Graciela se puso a llorar y se quejó con la profesora. Sus compañeros explicaron que querían enseñarle la lección del evangelio de amar a los demás como a uno mismo. Graciela comprendió que a nadie le gusta que lo apoden y prometió

1. LECTURA MOTIVADORA
“EL DÍA QUE CAMBIÓ GRACIELA”
I.E.S.M “ALBERTO ESCOBAR
EL MILAGRO
Había una niña que le ponía apodos a sus compañeros (as), y los demás se burlaban de los
que tenían sobrenombre.
Un día sus compañeros, cansados por los apodos que les había puesto Graciela, se pusieron
de acuerdo para colocarle toda clase de apodos a ella.
Cuando la encontraron, la llamaron con muchísimos nombres menos con el suyo.
La niña inmediatamente se puso a llorar y se mostró muy disgustada porque le decían de todo
y se fue a dar quejas.
Cuando la profesora los reunió a sus compañeros dijeron: señorita, lo que pasa es que en
catequesis oímos la explicación del evangelio “Amar a los otros como a ti mismo” y pensamos
que Graciela necesitaba ver cómo se ama ella así mismo . Por eso nos reunimos y quisimos
enseñarle que como no le gusta que le pongan apodos, pues tampoco debe ponernos a
nosotros. Ese día Graciela entendió que a todos les gusta que les respeten y, llorando,
prometió no volver a hacerlo.