Este documento presenta una letanía dedicada a los santos ángeles. En ella se invoca a Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, a la Virgen María y a varios ángeles individuales como Miguel, Gabriel y Rafael. Se pide la intercesión de los diferentes coros angelicales como serafines, querubines y tronos, así como de los ángeles custodios. Finalmente, se ruega a todos los santos ángeles que asistan a los fieles tanto en vida como en la muerte.