La Ley sobre Delitos Informáticos tiene como objetivo proteger los sistemas que utilizan tecnologías de información y prevenir y sancionar delitos cometidos contra o mediante estas tecnologías. Sin embargo, presenta múltiples deficiencias técnicas y lagunas que la hacen insuficiente, por lo que se necesitará una nueva tipificación de los delitos de forma sistemática en el nuevo Código Penal.