La Luna le pide a su hijo, el Lucero, que busque a su padre y le de un mensaje. El Lucero busca a su padre en el este y el oeste pero no lo encuentra. Aunque a veces llega tarde o temprano a causa de la búsqueda, promete a su madre que seguirá buscándolo hasta encontrarlo. El Lucero se puede ver dos veces al día, antes del amanecer y después del atardecer, siempre cerca de su madre, la Luna.