Los Iberos llegaron a la península ibérica desde el Mediterráneo oriental durante el periodo Neolítico. Tenían una sociedad jerarquizada con élites dirigentes, grupos medios de mercaderes y artesanos, y grupos inferiores de agricultores, ganaderos y esclavos. Su economía se basaba en la agricultura, ganadería, pesca, caza y minería. Vivían en oppida y asentamientos rurales, y su lengua, aunque aislada, mostraba afinidades con el vasco y el