La madera se obtiene de los árboles y se compone principalmente de fibras de celulosa unidas con lignina. Se distinguen varias capas en un árbol talado, siendo la albura la más blanda y el duramen la más dura. Las propiedades de la madera, como su color, textura y densidad, determinan sus usos. La industria maderera transforma la madera mediante procesos de talado, descortezado, troceado y secado antes de darle forma comercial para su uso.