Los mapas conceptuales son representaciones gráficas del conocimiento que muestran cómo está organizado. Deben ser concisos, simples y vistosos para llamar la atención y facilitar la comprensión. Los conceptos se representan con óvalos y las relaciones con líneas y flechas, y pueden usar colores, imágenes y números. Existen relaciones jerárquicas, secuenciales, causales y comparativas entre conceptos, y se pueden establecer diferentes estructuras y tipos de mapas conceptuales para diferentes objetivos y temas.