2. introducción
El medio ambiente es el entorno centrado en la
diversidad de especies, donde se incluyen
elementos naturales y artificiales que se
relacionan entre sí; y que pueden verse
modificados a partir del comportamiento
humano.
3. • No obstante, existe una clasificación en la que
se habla de medio ambiente natural como
aquel entorno conformado por elementos que
nacen de manera natural, sin intervención
humana; a diferencia del medio ambiente
construido que es el que comprende
modificaciones dadas a partir de la población
humana.
5. Las triple R
• Reducir
Reducir, es decir, hacer uso de la menor cantidad de recursos
naturales posibles, es la acción más importante que los
consumidores pueden hacer por el medio ambiente. El
objetivo no es que no se consuma nada, sino hacerlo de forma
sostenible. Los productos de usar y tirar o los que llevan un
empaquetado excesivo son los primeros que se deben evitar.
En nuestra vida cotidiana se puede reducir con distintas
medidas beneficiosas de ahorro para el medio ambiente y el
bolsillo:
Agua: no dejar grifos abiertos, arreglar los que goteen, instalar
sistemas de ahorro o reducir el consumo de los productos que
más agua necesitan para su creación (agua virtual)
disminuirán el gasto de este recurso.
6. • 2. Reutilizar
• Darles a los productos la máxima vida útil posible. Con
la reutilización, además de generar menos residuos y
menos impacto ambiental, los consumidores ahorran
dinero. A la hora de hacer la compra, se puede llevar
un carro o bolsas reutilizables para evitar las de
plástico de un solo uso (aunque estas también se
pueden reutilizar si se sabe cómo), y en casa se pueden
utilizar tarros, frascos o cajas para guardar todo tipo de
productos, rellenar los cartuchos de tinta de la
impresora, usar pilas recargables, actualizar el
ordenador, etc. Estas son algunas de las formas de
reutilizar más comunes, pero no las únicas
7. • 3. Reciclar
• Tras consumir de forma sostenible los productos y darles la
mayor vida útil posible, es el turno de aprovechar sus
materiales para volver a hacer otros productos. Los
beneficios para el medio ambiente de reciclar son tan
considerables que el esfuerzo merece la pena. Para ello,
hay diversos contenedores que hay que conocer. En el
amarillo los envases de plástico y metal, en el azul el papel
y cartón, y en el verde el vidrio. Para evitar errores en el
reciclaje conviene saber los diferentes tipos de residuos y
dónde se deben reciclar. Además de los tres contenedores
más típicos, hay también otros para pilas, bombillas o
el aceite usado.