El documento es un mensaje pascual del Obispo Castrense y Secretario General de la CEP que celebra la resurrección de Jesús y llama a los fieles cristianos a mantener la esperanza viva a través de la conversión sincera y el compromiso con los más necesitados, superando el pecado y promoviendo la solidaridad, para seguir el camino de esperanza marcado por Cristo hacia una nueva humanidad.